ESTOY EMBARAZADA, ¿Y AHORA QUÉ?
Estar embarazada o tener una conocida que esté embarazada es muy habitual y también lo es el escuchar teorías que están muy popularizadas entre la gente de a pie. Seguro que alguna vez has oído cosas como por ejemplo “tienes que comer por dos ahora que estás embarazada”, “con andar ya tienes suficiente ejercicio no vayas a hacerle daño al bebé”, “no se pueden tener relaciones sexuales mientras estás embarazada” y un montón de etcéteras que, gracias a que la gente está más informada se van eliminando cada vez más.
En un ámbito normal, cuando llega la noticia de un nuevo embarazo es sinónimo de alegría. Llega una nueva vida, buscada y deseada, un proyecto en común o en solitario en el que se van a poner muchas emociones a flor de piel. Ahora bien, es muy posible que después de la primera impresión aparezcan muchas dudas, sobre todo si es el primer embarazo: “¿Qué voy a notar estando embarazada?” “¿Qué le va a pasar a mi cuerpo” “¿Voy a tener náuseas?” “¿Le pasa algo al bebé si hago ejercicio?” “He oído hablar de la incontinencia urinaria, ¿eso me va a pasar a mí?”… Todas estas posibles preocupaciones son normales y es muy importante tener información de primera mano para llevar un embarazo lo más tranquilo y seguro posible.
Los cambios corporales en el embarazo van a estar determinados por la segregación de hormonas principalmente, pero muy importante también el estilo de vida que lleva la futura mamá (visita nuestro artículo https://clinicashambhala.com/2022/01/31/estilo-de-vida-en-el-embarazo/ ). Durante las 40 +/- 2 semanas de embarazo, se van a dar una serie de cambios pero no necesariamente todas las mujeres van a pasar por la mismos, ni de la misma manera.
PRIMER TRIMESTRE
- Aparece el cansancio, el sueño, la necesidad de dormir más horas. El organismo se pone en marcha para que la madre descanse más de lo que hace normalmente. Este punto es muy importante, ya que desde el descanso de la madre se puede programar el eje de estrés del futuro bebé.
- Debido a la actividad de algunas hormonas (la famosa progesterona) aumenta la necesidad de hacer pis. Más adelante, aumentarán estas ganas de orinar por el tamaño del útero.
- Es probable (o no) que aparezcan náuseas y mareos, los que durarán solo el primer trimestre. En caso de durar todo el embarazo, se deben tener en cuenta a la hora de valorar el estado de la musculatura del suelo pélvico porque la presión que soporta cuando hay vómitos es mucho mayor y puede terminar afectando a su capacidad de contracción.
- En cuanto a cambios externos visibles al resto de personas, el pecho aumenta de tamaño y se prepara para la futura lactancia, las caderas se desdibujan, la piel es más luminosa y el pelo más brillante. Es posible que las encías y la nariz sangren. Pueden aparecer cambios de humor desde ansiedad e inseguridad hasta alegría si es un embarazo deseado.
SEGUNDO TRIMESTRE
- De los tres trimestres, este suele ser el mejor, mucho más llevadero. El bebé está creciendo y si todo apunta que el embarazo va bien, las madres suelen estar más tranquilas. Es un periodo de adaptación y crecimiento.
- El útero se va metiendo en el espacio del abdomen y ya se empiezan a notar los movimientos que hace el bebé. Es por esto por lo que las digestiones se vuelvan más pesadas, aparecen los gases, el estreñimiento y los reflujos, por lo que se debe estar muy pendiente de que la alimentación sea la adecuada.
- El pecho sigue creciendo, aunque mucho menos que en el primer trimestre, y se puede empezar a ver que las mamas expulsan un líquido transparente llamado calostro.
- En la piel del abdomen se puede notar mucho más la línea alba, (también llamada “línea nigra”), línea que va del ombligo al pubis, más oscura, y que puedan aparecer manchas por la cara, alrededor de la boca y la nariz llamadas melasma o cloasma. También aparecen las estrías en muslos, abdomen o pecho que pueden hacer que la piel empiece a picar.
TERCER TRIMESTRE
- Al haber un conflicto de espacio en el abdomen por el crecimiento del bebé, las digestiones y el estreñimiento se acentúan, hay más dificultad de respirar porque el diafragma está ya muy distendido. Aumentan las ganas de orinar porque aumenta la presión tanto en la vejiga como en los esfínteres (la vejiga es como un cojín para el bebé).
- El retorno venoso se ve afectado por el crecimiento del abdomen por lo que pueden aparecer varices tanto en las piernas como en la vulva e, incluso, hemorroides.
- Por lo general, las madres están ya muy cansadas, sobre todo en el último mes, porque no pueden dormir bien por el tamaño del abdomen, están incómodas e incluso, inseguras y con miedos ante el parto, por lo que se les debe proporcionar información de calidad.
- Durante todo el embarazo, el corazón ha tenido que bombear mucha más sangre por todo el cuerpo por lo que existe una anemia que es fisiológica dentro de ciertos niveles, algo que el médico deberá tener en cuenta para que no se vuelva patológico. Es normal que cuando se vuelva patológica, se mande tomar hierro, teniendo en cuenta también que aumentará el estreñimiento.
- Ahora, más que antes, se tiene en cuenta la ganancia de peso durante el embarazo. Una mujer debería engordar unos 12,5kg en todos estos meses, más podría suponer complicaciones ya sean a nivel de dolores articulares y/o musculares, por una mala gestión de cargas, hasta un aumento de riesgo de tener patologías tipo diabetes o hipertensión gestacional.