Dejar de fumar…¿con acupuntura?
La adicción al tabaco supone un problema para todo aquél que se plantee dejar este hábito. La Acupuntura está reconocida por la Organización Mundial de la Salud como una de las terapias que más ayudan con no únicamente el tabaco sino también con otras adicciones (Alcohol, fármacos y otras drogas) así como comportamientos adictivos (como puede ser la dependencia, o hábitos que condicionan nuestra salud).
No obstante, ¿es suficiente la acupuntura para dejar de fumar?
Absolutamente no. Lo más importante son dos factores: Querer dejar de fumar y Poder dejar de fumar.
“Querer dejar de fumar” se refiere a la capacidad para poder dejar el hábito, encontrando estímulos sanos que alimenten el circuito neurológico de recompensa que en este momento aporta el tabaco. El hábito se refiere a la parte emocional y social, más que a la química. Es un nivel de adicción menor. Lo único necesario es la voluntad para dejar el hábito y conseguir alcanzar nuevos objetivos. La acupuntura puede ser muy útil de cara a trabajar el hábito; mientras que la Kinesiología Aplicada nos ayuda a encontrar esos nuevos objetivos a conseguir, así como las posibles trabas emocionales que podemos encontrar a la hora de abandonar el tabaco.
Por otro lado, “poder dejar de fumar” se refiere a la capacidad química del organismo para romper el circuito neurológico de recompensa que se pone en marcha al entrar en contacto con los compuestos químicos del tabaco, así como a la capacidad para deshabituar al organismo de éstos. Para ello nos pueden ser útiles no sólo la acupuntura, sino la adquisición de unos hábitos de vida saludables, que implican tanto la alimentación como la gestión emocional. En este último aspecto, resulta interesante que la gran mayoría de personas que se plantean dejar de fumar lo hacen cuando surge la posibilidad de un cambio vital, como un cambio de trabajo o el nacimiento de un descendiente. Es aquí donde más eficaz puede ser la intervención con Kinesiología Aplicada.
Así pues, no es suficiente con tener voluntad de dejar el tabaco, sino que hay que recuperar el equilibrio de los circuitos neurológicos que tienen que ver con la gratificación y recompensa. No digo que sea indispensable recurrir a la Psicología, Acupuntura, Kinesiología Aplicada y otras terapias: Muchas personas han conseguido dejar el tabaco y otras adicciones por sí mismas.
Ahora bien, siempre que haya un componente químico en la adicción (poder dejarlo) que supere al hábito (querer dejarlo), tanto la Acupuntura como la Kinesiología Aplicada son recomendables. Pueden ayudar a que el proceso sea más llevadero, mitigando notablemente el síndrome de abstinencia y ayudando a prevenir los efectos secundarios como el aumento de volumen.
Si quieres dejar el tabaco, siempre va a ser por ti mismo/a, pero puedes contar con ayuda que te facilite el camino.